Neptuno comienza a retrogradar el 18 de Junio en el grado 16° 30′ de Piscis y lo hará hasta el 24 de Noviembre en el grado 13° 42′. Esta retrogradación afecta más a Piscis de Sol o ascendente, ya que Neptuno es su regente…y está en su casa.
Este planeta es un velo de idealización, es la expresión máxima del arte y la espiritualidad. Es la imaginación, la fantasía, los cuentos de hadas, la mística, la sanación, pero también las mentiras y los engaños. Es quien disuelve límites, fronteras, es la ensoñación, la conexión con el Universo, los estados de trance, las drogas y los vicios. También representa los miedos e inseguridades.
Cuando retrograda, podemos encontrar el camino hacia el paraíso o hacia el fondo del abismo. Podemos guiarnos hacia la espiritualidad mucho más fácilmente, o, por el contrario, podemos sentirnos perdidos sin saber qué rumbo tomar, sintiendo ganas de “volver a casa”, frustradas y confusas. Todo depende de la vibración que manejemos: esto es maravilloso o tristísimo.
Nos ayuda a darnos cuenta de la dimensión de nuestros sueños y a buscar caminos para hacerlos realidad.
Neptuno retro nos da un período excelente para soltar, dejar ir, hacer/aprender terapias relacionadas a la sanación y la espiritualidad, y para conectar con nuestro ser creativo, con nuestra imaginación. Es una energía muy suave, muy sutil. Incrementa nuestra intuición y conexión universal.
En este período también se potencian nuestros sueños, podemos sentir que estamos en las nubes (sobretodo los días que inicia y termina la retrogradación), buscamos conectar con nuestra fantasía y sueños más grandes. Como estamos en temporada de eclipses, presten atención a todas las señales mágicas que el Universo puede presentarles, a las personas y a las situaciones que se conectan.
Nada es por casualidad.