Cuando los planetas retrogradan, su magnitud en el cielo aumenta, están más brillantes. Esto me hace pensar cuán importante es el período en que un planeta nos lleva “hacia adentro”, como hoy lo hace Júpiter: no podremos viajar ni salir de nuestras fronteras, pero sí podemos hacer viajes internos. La luz está adentro.
Júpiter comienza a retrogradar el 14 de mayo, días antes de perfeccionar su trino al Sol, y se vuelve directo unos días después de que lo repite, con el Sol desde otro signo: esto hace que su energía optimista nos llegue como un caudal, justo antes de que nuestros proyectos y todo aquello de su influencia -viajes, estudios superiores, todo lo vinculado a nuestro crecimiento desde la experiencia- comiencen a sentirse algo ralentizados. En estos momentos nos damos cuenta de que nuestros planes precisan algo más de tiempo de lo que habíamos estipulado. Y es necesaria la pausa para no irnos de cabeza y arrepentirnos después.
La casa Capricornio de nuestra carta natal está entregada al orden cósmico a partir de ahora, durante las retrogradaciones de Júpiter, Saturno y Plutón. Lo personal no tiene tanta fuerza como antes, es decir, no tenemos el control de los acontecimientos y hacer fuerza para recuperarlo sólo nos hará perder energía. El yo no es nada comparado con el Plan Divino que aceptamos antes de encarnar.
Lo mejor que podés hacer, es observar tus normas, leyes y creencias internas al respecto de lo moral, lo ético, el deber ser, el status quo, el trabajo, los emprendimientos,(y a todo lo vinculado con la casa Capri de tu carta). Al permitirnos cuestionar lo que hemos considerado incuestionable, porque la familia, la sociedad y el colectivo “siempre dijeron que es así”, nos estaremos permitiendo una nueva perspectiva, esta vez menos sagitariana y más pisciana, más entregada al Universo, confiando en que algo más grande que nuestro ego realmente sabe qué es lo mejor para nosotros.
Con los retrógrados, el inconsciente manda. Si algo no se da como esperabas, o toma más tiempo, estate segura de que lo que vos querías no era tan bueno como lo que realmente vaya a suceder, probablemente las cosas se den de la mejor manera para tu crecimiento, más allá de lo que consideres correcto o incorrecto.
Tu Yo Superior tiene un plan de reajuste que no estás viendo, así que entregate a Júpiter, y confiá. La paciencia es fundamental, sobretodo hasta el 12 de septiembre cuando Júpiter vuelva a estar directo.