No es casual que estas frases, en su gran mayoría, estén dirigidas a mujeres. Porque desde hace muchísimos años se nos limitó el acceso a los grandes símbolos de poder: dinero, negocios y cargos altos.
Ayer comencé un programa alucinante con mi mentora favorita @dianazuluaga.co y me despertó tantas preguntas…
¿Cuánto te molesta que una mujer haga más #dinero del que imaginás?
¿Cuánto te molesta que una mujer sea #dueña de su #negocio?
¿Cuánto te molesta que los #servicios#espirituales se cobren? ¿Vos vivís del aire? ¿O solamente pretendés que tus valores y tu moral sean la vara con la que se miden el trabajo y ganancias ajenas?
¿Cuánto te molesta que una mujer sea #líder?
¿Cuánto te molesta que el dinero sea una expresión del #espíritu? ¿Seguís creyendo que el servicio debe ser «puro» y que el dinero es corrupto?
¿Sabías que las grandes instituciones que denuncian que el dinero es sucio, son las que más cantidad manejan, y las que más poder sobre nosotros tienen y desean seguir teniendo?
¿Sabías que no abrirte a cambiar tu punto de vista sobre la plata te sigue dejando en un lugar de carencia, sólo porque preferís seguir teniendo la razón?
¿Sabías que seguir creyendo que lo espiritual y lo mundano no pueden juntarse, es estar preso/a de la mirada religiosa y abusadora más patriarcal que existe?
¿Cuánto te duele darte cuenta que sostenés una postura y creencias rígidas sólo porque así fue siempre y te da pánico cuestionarte?
¿Cuándo vas a abrir los ojos a que a veces es mejor no tener la razón y sencillamente ser libre de puntos de vista limitantes?
¿Cuándo vas a ver que el sistema también sos vos? ¿Que podés tener una perspectiva fuera de él, que no te aprisione?
Mujer: ¿Cuánto miedo le tenés a tu poder, a tu liderazgo, a tu capacidad de generar riqueza?
¿Cuánto miedo tenés a ocupar tu lugar y dejar de quedarte escondida en un rincón?
¿Cuánto miedo tenés a alzar tu voz?
¿Sabías que podés tener éxito -lo que para vos eso signifique- sin tener que imitar la energía masculina que te inculcaron como exitosa?
¿Cuándo te vas a dar cuenta que vos también viniste a cambiar el mundo?
Con muchas ganas de construir con más amor en el colectivo,
Ale.