¡Este sitio está experimentando algunos cambios este mes! Algunas funciones pueden estar deshabilitadas.

Gracias por su comprensión :)

Honrar el proceso

La Luna acaba de ingresar a Escorpio. Desde allí, como cada mes, se va a oponer a Urano en Tauro. Y el eje Tauro-Escorpio es el eje de los procesos, de ir paso a paso, poco a poco.

En el último tiempo noté muchas cosas en común en consultas de carta natal, registros akáshicos y energía generalizada, y hasta en cosas que hablé con amigas, que me gustaría compartirles:

1- Cuando descubrimos, aprendemos o leemos sobre alguna herramienta o terapia, la primera pregunta que surge es “¿Cómo lo hago?”. Cómo. El cómo inevitablemente invita y abre un proceso. Y esto implica que no hay respuesta o solución mágica inmediata. La única respuesta es siempre ATRAVESAR EL PROCESO.

2- Fórmulas mágicas para sanar o integrar nuestra sombra por ejemplo, NO HAY. Y sin embargo se las encuentra generalizadas en las redes por doquier. Es necesario cuidar no sólo lo que consumimos sino también lo que comunicamos y cómo. La información repetida satura, y de eso también hay un montón: repetición para no perderme, para pertenecer. ¿A qué costo?

3- Hacer un proceso terapéutico de la herramienta que te resuene con el terapeuta de tu confianza, no te hace terapeuta. Estudiar un curso de terapeuta holística en seis meses, tampoco.
Estamos acostumbrados al certificado que avala el conocimiento, pero en lo terapéutico o en lo psicológico el conocimiento no es ni puede ser lo único: el terapeuta también necesita atravesar su propio proceso.

Y no, lo inmediato no es nunca lo que funciona.

4- Ser terapeuta, psicólogo o coach NO ES SER UN SALVADOR, ni un sanador. Nadie salva o sana a nadie, más que a sí mismo.

5- Una vez que entramos en el gran proceso de observarnos a nosotras mismas, el error es no dejar de hacerlo ni cagando. Ríanse, pero no nos dejamos en paz. Es agotador observar la sombra y la proyección todo el tiempo, a la jueza interna, al moralista interior. El silencio, la calma, soltar la autocrítica y autoobservación exagerada, ser una persona chota por un rato, putear, entrar en la mierda para desahogarnos, eso también es SER HUMANAS.

Coherencia, presencia, responsabilidad, y proceso.
Están siendo mis palabras favoritas.
¿Y las de ustedes?

Compartir en

Más para leer

tu por qué

Tu porqué

Cuando me olvidé de mi porqué, me perdí.
Cuando lo recuperé, no sólo volví a mí sino que, cuando me dijeron literal “Follow your heart”, algo se encendió ahí, en mi pecho.

Leer artículo