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Luna llena en Tauro

El 31 de octubre a las 11:49 de la mañana (horario Uruguay/Chile/Argentina) se perfecciona la Luna llena en Tauro.

Aspectos

La Luna estará en conjunción a Urano retrogradando en Tauro, mientras ambos se oponen al Sol. Mercurio retro en Libra se cuadra a la triple conjunción y Neptuno está en sextil, Venus en Libra se opone a Quirón retro en Aries.

Cuesta nacer a un nuevo mundo. Cuesta parir, ser parido, atravesar el portal.

Técnicamente, parados en el 2020, faltan como cien años y pico para entrar de lleno en la Era de Acuario. Pero, como toda Era, se funde con la anterior mucho antes y ya desde la Revolución Francesa aproximadamente que la venimos venir.

Urano es el regente moderno de Acuario, el signo que no sólo regirá/rige la Nueva Era, sino también donde ingresarán Júpiter y Saturno juntos en diciembre. Nueva normalidad (o el adiós a la normalidad), Nueva Tierra, Nueva Humanidad.

Se le llama “Luna azul”, pero de azul no tiene nada: es la segunda Luna llena dentro del mismo mes calendario. La anterior fue la Luna llena en Aries el 1 de octubre.

Entonces…

No es poco que esta Luna llena, cerrando un ciclo que atravesó toda la pandemia, nos muestre los resultados de aprender a ser pacientes, a darnos pausas, de recordar cómo estimular nuestros sentidos en un mundo que nos los tenía apagados. Nos muestra cuánto crecimos dándonos tiempo para el relax, el placer, el disfrute de estar vivos. Aprendimos a atravesar procesos, algunos casi sin darse cuenta. La ansiedad, la angustia y la impaciencia pueden seguir estando allí, pero hemos visto las recompensas de saber esperar.

Se nos ha venido preparando para este momento y el disparador tal vez no estaba programado, pero así como surgió de “lo mal que hacemos las cosas”, o de malas intenciones (no creo que lo lleguemos a saber) nos trajo a este punto cero, a un reinicio total de nuestro sistema de valores y sobretodo, de nuestra relación con la Pachamama, con la naturaleza.

Tuvimos y seguimos teniendo grandes alertas ambientales, que van de la mano con un movimiento ecológico gigante, cada vez más personas se pre-ocupan y ocupan de dejar un mundo mejor, más sano, para las próximas generaciones.

La Luna en conjunción a Urano enfrentándose al Sol, representa la revolución de los valores ancestrales. Rompe los valores anclados patriarcales, recupera los valores abandonados matriarcales. No es una guerra: se necesita la comunión para que dejen de doler el desequilibrio, los abusos, la incoherencia.

Ella contiene la sabiduría de los que antes estaban unidos con la Tierra, de religiones que no eran tales y que respetaban a todas las energías, que veneraban a la Diosa creadora tanto como al Dios. Porque la síntesis del todo tiene las dos energías, el Yin y el Yang desde donde todo es creado.

Retomar de la antigüedad lo que realmente vale la pena también es parte de un cambio de Era, como si fuéramos a reencarnar y tuviéramos que llevarnos la sabiduría de la vieja vida hacia la nueva, dejando atrás lo putrefacto, lo que se llenó de hongos porque estuvo mucho tiempo en el mismo lugar. Cuando dejamos orgánico quieto mucho tiempo, viene la muerte y lo corroe. Se llena de hongos y bichitos, de lo muerto nace la nueva vida. Se atraviesa un umbral. Y así estamos ahora.

La Luna llena se perfecciona en un día portal como Samhain/Beltane, y ella de por sí ya es un portal. Uniendo las dimensiones, atravesando los velos, abriendo las compuertas encontraremos las respuestas. Todo es lo mismo, sólo tiene diferentes versiones de consciencia. Como es arriba, es abajo.

El apuro que sentimos por la ascensión no es casual, pero tampoco es una boludez para comprar en el super: se trata de realmente ascender en consciencia para permitirle a Gaia poder ascender también. Y es que lo importante no somos nosotros: ella se moverá a la quinta dimensión de consciencia lo queramos o no. El asunto es si nos prestamos a colaborar, creciendo como individuos y colectivo hijos de ella, o la abandonamos prefiriendo llorar de miedo en un rincón.

Es tiempo para ser valientes, trascender los miedos que la Luna llena también nos muestra, con el Sol escorpiano de frente. Lo que la Luna traduce de sus códigos solares, nos llega cada noche a nivel inconsciente y lo podemos ver representado en sueños, que luego pedirán su traducción.

Es momento de soltar las amarras oxidadas. Todo este año y los tiempos que vienen nos seguirán pidiendo desapego, soltar el control, trascender los miedos. Cada quien buscará el camino a su manera, pero lo importante al final, es que la evolución nos encuentre de la mano.

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